Te ha pasado alguna vez
sentir una sensación
que te embriaga el corazón
y que se marcha después…?
Algo que llega, quizás,
como el eco de una risa,
parece que se eterniza…,
y al instante no está más…?
Un sentimiento distinto
de todos los que has sentido,
como si hubieses salido
de pronto de un laberinto,
…y dejando atrás lo gris,
lo oscuro y lo deprimente,
te sintieras de repente
inmensamente feliz…?
Y te dices “¿¡qué pasó…?!,
¿qué fue este toque divino?,
¿un regalo del destino…?,
¿un Ángel que me rozó…?”
Pero en el fondo de ti
ya conoces la respuesta…,
¡que el alma siempre contesta
al que se pregunta así!
Y te dices con unción:
“esto que sentí hace un rato,
este sublime arrebato…,
¡fue Dios en mi corazón…!”.
Hola Jorge,querido amigo….
Sí.,….me ha pasado y se siente tal como lo expresas de modo muy sencillo y bello.
Muchas gracias.
Un beso
¡Brindo por esa experiencia de Lo Divino en tu corazón!
Gracias por tu visita.
Un beso
Tal cual lo describiste… así es…
" …y dejando atrás lo gris,
lo oscuro y lo deprimente,
te sintieras de repente
inmensamente feliz…?"
una felicidad que te llena, te da paz, te hace sonreir…te envuelve.. mmmmm….
gracias Jorge.. una vez más
un abrazo grandeee…!!!
Juana Mª
¡Hago votos para que abunden en tu vida esos ramalazos de luz, querida Juana…porque tú los mereces como nadie!
Hola Jorge, hermosa inspiracion …., transciende en lo mas profundo del alma. gracias por Ser y Estar. Hasta Siempre.
Gracias, Catalina…, por permitir que estas rimas te rocen el alma…
¡Bendiciones, amiga!