¡AQUIÉTATE!
(…como un lago inmóvil, espejado y terso,
en el que se mira todo el Universo…)

¡AQUIÉTATE…!
(…hasta que en tu mente, -sin pausa ni apuro-,
se haga ese vacío del silencio puro…)

¡AQUIÉTATE…!
(…con tu ser entero…consagrado en pos
de fundir en Uno…lo que antes fue dos…)

Y SABE…
(…en un parpadeo de tu percepción,
-con esa certeza que da el corazón…-)

QUE TU…ERES…DIOS…