(Toma la que más te agrada,
y ponla en tu corazón,
para que su vibración
coloree tu jornada.)

“Me siento perfectamente,
fuerte, sano, vigoroso,
y voy andando dichoso,
disfrutando del presente.”

“¡Las amo, células mías,
y les agradezco tanto
la plenitud y el encanto
de vivir con lozanía!”

“Yo sé que soy importante,
y que mi actual existencia
produce una diferencia
en el Cósmico Cuadrante.”

“Marcho tranquilo y confiado,
marcho seguro y sereno,
y porque espero lo bueno,
lo bueno me es otorgado.”

“Los voy pintando a mis días
como un eximio pintor,
usando el mejor color:
el color de la alegría…”

“Sé que lo que entrego, vuelve;
que cuanto más doy, más tengo;
que de Lo Infinito vengo
y Lo Infinito me envuelve…”

“Soy emprendedor y osado,
y amo lo desconocido,
y me adentro, decidido,
en dónde nadie ha pisado.”

“Si una meta me entusiasma,
la creo primero en mi mente,
y al ¨verla¨ nítidamente,
mucho más fácil se plasma”.

“A mi Intención la refino,
la pulo como un diamante,
y la lanzo hacia adelante
a que me asfalte el camino.”

“Agradezco en este viaje
cada yerro y cada herida:
¡qué sería de la vida
si no hubiera aprendizaje!”

“Sé que mi Padre me hospeda,
y sé que hay un Plan también,
y sé que todo está bien…
¡suceda lo que suceda!”