En este tiempo de turbulencia que te marea,
el universo muy dulcemente hoy te rodea,

y una energía nueva y flamante que ahora te envuelve,
a los engramas que ya no sirven te los disuelve,

y anula el karma que en tantas vidas te ha limitado,
y te hace libre completamente de ese pasado.

Tú tienes brillo, bondad, talento, sabiduría,
y no hay ahora nada que frene tanta Maestría.

Tan solo debes tomar conciencia de que eso es cierto,
y transformarte en Luz en medio del desconcierto.

Cuando lo hagas sabrás que pisas la senda recta,
porque te llegue lo que te llegue… ¡ya no te afecta!

Allí comprendes que dura apenas un parpadeo
al no endosarle las etiquetas de oscuro o feo.

Si hasta la nube que allí en lo alto su gris nos deja,
al mismo tiempo lo abraza al viento que la despeja.

¡Vamos!, asume el poderío de tu grandeza,
¡toma la mano de Lo Infinito que te atraviesa!

Sabrás entonces que te sostienen ya tus dos alas,
por esa leve semi sonrisa que en ti se instala.

Y es que no hay forma más elevada de andar viviendo,
que aún en el medio de la tormenta, ¡seguir sonriendo!