¡Yo Soy quién Yo Soy…!, y mi alma se expande
en ondas radiantes de dulce candor…
Yo encarno en la Tierra el poder más grande:
¡el de verlo todo sólo con amor…!

¡Yo Soy quién Yo Soy…!, y nada me hiere,
¡porque ya no hay ego al cuál lastimar!,
y mi Ser Divino, allí adónde fuere,
me dice que vine a amar por amar…

¡Yo Soy quién Yo Soy…!: Crística Conciencia
que lo eleva todo con su vibración…
Yo Soy la confianza…, Yo Soy la paciencia…,
¡y Soy la ternura de mi corazón…!

¡Yo Soy quién Yo Soy…!, y lo abrazo todo
de manera plena, completa, total…,
porque no concibo vivir de otro modo
que no sea el de darse, incondicional…

¡Yo Soy quién Yo Soy…!, y tomo tu mano…,
y juntos subimos un peldaño más…:
¡un Ángel Humano y otro Ángel Humano
que van irradiando su luz y su paz…!

Y mientras andamos la esencia del día
hacia el bucle de oro de un eterno hoy,
vamos escuchando que una melodía
nos dice por dentro “¡Yo Soy quién Yo Soy…!”.