En tu muy largo andar
debiste atravesar
bajadas y subidas,
pero hubo más sollozos
que momentos de gozo
en cada encarnación,
que el rol que te ha tocado
de ser “adelantado”
te marcó en cada vida,
pues la “vieja energía”
no era una buena vía
para ejercer tu don.

Pero hoy día
la alegría
que no tiene
explicación,
inunda de 
epifanías
tu precioso
corazón.

Una Energía Nueva
ahora te eleva,
te deja brillante,
y una algarabía
lo pinta a tu día
de oro y carmesí,
y vas aprendiendo
a vivir sintiendo
la paz del instante,
disfrutando ese gozo
puro y luminoso
que aparece allí.

Y si ríes
y esa risa
te llega sin
invitación,
eso pasa
porque pisas
ya en la quinta
dimensión.

Y vas por tu senda
quitando las vendas
de los que aún no ven,
usando para ello
los preciosos destellos
de tu buen humor,
y con ligereza,
ternura y belleza
les haces ver bien,
que ellos son una hermosa,
radiante y grandiosa
porción del Creador.

Hoy la dicha
sin motivo,
y sin ninguna causa,
ya está aquí…,
y te busca
Alma Antigua,
¡viene toda
para ti!