“¡Absurdo!”…, como un pájaro volar…
“¡Ingenuo!”…, hablar con alguien muy distante…
“¡Imposible!”…, la viruela erradicar…
“¡Necedad!”…, en la Luna un caminante…
Y es que el pensar común sólo discurre
alrededor de lo que ya conoce:
¡a nadie, compañero, se le ocurre,
pensar en algo que se desconoce!
Y ello es en cierto modo natural
pues no sabemos qué es lo que ignoramos,
y nos parece “lógico y normal”
la forma lenta en la que progresamos.
Y el “sistema de ideas” imperante
fija lo que “es posible” en su diseño,
hasta que alguna noche, algún soñante,
salta ese muro…, ¡y sueña un nuevo sueño!
En esencia, pensar en “lo imposible”,
es “ver” algún futuro “ya existente”,
y tirando una red en lo Invisible,
jalarlo de algún modo hasta el presente.
Imaginar lo utópico lo atrae
por senderos que aún no comprendemos,
y de una forma muy real nos trae
las soluciones que desconocemos.
Pensemos de ese modo, amigo mío,
dejemos libre la imaginación,
que fluya poderosa como un río
de la más pura y alta inspiración:
la sanación, completa y al instante…,
la gente en paz…-¡nunca más una guerra!-,
la energía, gratuita y abundante…,
comida para todos en la Tierra…
Viajar sin naves de ninguna clase…,
la amistad con hermanos de “allí afuera”…,
vivir haciendo lo que más nos place…,
el amor como única bandera…
Imaginemos ya en la Tierra el Cielo,
y otro Mundo mejor será palpable,
si con dedicación y con anhelo,
entre todos, ¡pensamos “lo impensable”!.
Me uno con pasión segura, a tu amorosa propuesta ….
Bienvenida "al Club"…