¿Sabes que tu percepción
capta sólo una fracción
del Campo Electromagnético?
Y esa forma de ceguera
te ha colocado anteojeras,
cual “calabozo energético”.

Y mientras así prosigas,
ellas harán que percibas
un mínimo porcentaje,
un pedacito irrisorio
y en un rango vibratorio
de muy pequeño voltaje.

Mas al ampliar tu conciencia
y permitir que tu Esencia
te eleve hacia otro estadío,
tu luz se vuelve una espada
diamantina y afilada
que disuelve lo sombrío…

Con ella rasgas el Velo
que te apartaba con celo
del Panorama Mayor,
y caen tus anteojeras,
¡y ya nada es como era
desde tu Versión Mejor!

Y el Creador en ti aparece,
y es como un Sol que amanece
y por tus ojos pasea…
Y empiezas a darte cuenta
que a tu mundo tú lo inventas,
pues al mirarlo, ¡lo creas!

Y con los ojos abiertos
vas caminando despierto
quizás por primera vez…,
¡y te emociona la vida!,
y brota en ti enloquecida
una preciosa embriaguez…

Y encuentras pasión en todo,
y hallas belleza en el lodo,
y fragancia en cualquier flor,
y el aire se hace brillante,
y la Vida a cada instante
te hace un Regalo de Amor…

Y te sientes muy ligero…,
y dices, cual prisionero
que de una cárcel salió:
“ya de nada estoy cautivo…
porque el mundo que percibo
¡me lo estoy creando yo!”