Cuando por la mañana te despiertas
retomas, sin dudarlo, tu papel,
y automáticamente allí te insertas
en tu traje de huesos, carne y piel.
Simplemente nos hemos habituado
a nuestros cuerpos de una forma tal,
que no nos hemos nunca preguntado
como sería…, trascender su umbral.
Y no nos damos cuenta que vivimos
como alumnos aislados en un aula,
y a nuestro aprendizaje lo ceñimos
a las limitaciones de esa jaula.
Pero hay seres en altas dimensiones
que no precisan ya de ningún traje,
y gozan de continuas expansiones
sin tener que cargar ese equipaje.
El cuerpo ya no es más “obligatorio”
en estados del “ser” más expandidos,
y pueden prescindir de un envoltorio,
o probar uno que no hayan conocido.
Y pueden ser “un hombre de la calle”,
o ser solo su Esencia iluminada,
o la flor más hermosa en algún valle,
o la galaxia que aún no fue explorada…
Y aunque a nosotros, desde nuestra escena,
nos cueste comprenderlo de algún modo,
hay en tal Juego de Experiencia Plena,
solo una norma: ¡el probarlo todo!
Y tras enriquecerse en lo diverso,
cuando ya se creció lo suficiente,
ayudan a plasmar los Universos
que surgen como Ideas de La Fuente.
Por eso, si te cansa ir confinado
por los barrotes de un estrecho cerco,
ya sabes: algún día, deslumbrado,
conocerás lo que es vivir sin cuerpo.
Y entonces ese día, amablemente,
exclamarás: “¡¿un traje?!, ¡una atadura!”,
y elegirás vivir dichosamente
desde un estado de “conciencia pura”.
«y elegirás vivir dichosamente desde un estado de conciencia pura»…
Un estado donde no existe el sufrimiento,cuyo único propósito es hacerte crecer .
¡Qué maravilla!
Muchas gracias por tus amorosas devoluciones,siempre,animándome a elevarme .
Tu LUZ ha tocado mi corazón,cada vez que visito tu sitio.
un abrazo grande
«Tu LUZ ha tocado mi corazón,cada vez que visito tu sitio.»
¡Qué hermoso que has pintado lo que en verdad es una simple «ley de resonancia», mi preciosa Leonor!: tú resuenas con mi sitio, porque la Luz ya está en tu corazón…
Enorme abrazo!