¡Suelten ya, compañeros, los miedos y las dudas,
y por fin, libremente, sean todo lo que son!
Ciudadanos del cosmos…dioses en miniatura…
¡Profesores graduados en “alta vibración”!

Y no vean más la vida como buena o mala…
No tengan etiquetas ni ganas de juzgar…
Vean tan solo un espacio de belleza infinita,
en donde lo que importa es aprender…y amar…

Un espacio sin ego, donde somos iguales,
y en donde nos reúne la inocencia del ser…
maestros y aprendices los unos de los otros…
todos apasionados por amar…y aprender…

Y exhalen el amor…como aroman las flores,
sin preguntarse dónde…para qué…ni por quién…
y cuando alguien les hiera…, hagan como hace el sándalo,
que al hacha que lo abate…¡la perfuma también…!