¡Avanza con gracia!:
tu acción inspirada
co-crea tu vida
sin que fuerces nada.

Y en la epifanía
de esa Luz inmerso,
te vuelves un socio
del propio Universo.

Y si te preguntas
“cómo”, “dónde” o “cuándo”,
lo sabes conforme
sigues avanzando.

Tal guía intuitiva
ni es “magia” ni es “don”:
es únicamente
“confianza en acción”.

Confianza en lo exacto
de un saber añejo,
un conocimiento
que viene de lejos,

y una perspicacia
que es supramental,
y trae intuiciones
del plano causal.

Cuando te permites
seguir esa guía,
cada paso lleva
a una sincronía…,

y sabes, mirando
su acertado impacto,
que el paso que sigue
también será el apto.

Y sueltas al viento
tu Intención más alta,
gritándole al mundo
que nada te falta.

Y fluyes alegre
con lo triste o magro,
pues sabes que puedes
volverlo un milagro.

Y marchas radiante
sintiendo contigo,
“eso” que te brinda
dirección y abrigo.

Y no hablo de un Ángel
ni de otra presencia,
¡hablo, compañero,
de tu propia Esencia!