La fugacidad es norma, y este tiempo que tenemos
es un viajero huidizo que se va sin avisar,
y de a poco, gradualmente, lentamente comprendemos
que hemos venido a este plano, solo a pasar…, y pasar…
Por eso, cuando la vida te muestra su cara triste,
y aquello que hasta ti llega, te intranquiliza o te indigna,
para aliviar esa pena que sin pudores te embiste,
“¡esto pasará también!”, tendrá que ser tu consigna.
Tomar conciencia de que ello es efímero y fugaz,
de que nada permanece, de que todo es transitorio,
en medio de tu tormenta te abre una isla de paz,
y percibes que el suceso es, en esencia, ilusorio.
Entonces te desentiendes de lo ficcional del drama,
empiezas a vislumbrar las dos facetas del juego,
y constatas, complacido ante el nuevo panorama,
que despacio, suavemente, se instala en ti el desapego.
Y por si acaso quisieras expandir más tu conciencia,
cuando todo te sonría y tu vida sea un edén,
y la dicha espolvoree su brillo por tu existencia,
entonces dite de nuevo: “¡esto pasará también!”
Y al ver que lo impermanente va alternando pena y gozo,
entrarás, aún sin buscarlo, en un viaje espiritual
hacia un Espacio Sagrado sin tristeza ni alborozo,
un ámbito luminoso por encima de lo dual.
Tu mirada se hará suave…, tu sonrisa, imperturbable…,
¡ya nada de lo que pase podrá conmoverte aquí!,
y cual nuevo Buda urbano, siempre dulce, siempre amable,
estarás en este mundo…, ¡sin que ya el mundo esté en ti!
Mi amado Jorge:
El desapego es aligerar el equipaje para poder viajar libre de ataduras, es confiar en que hay encuentros y desencuentros para en algún tiempo y lugar volvernos a reencontrar.
Esto ya ha pasado y puede volver a pasar, pero para ése entonces habremos crecido más…… Te amo.
Y es que me abraces sin esperar nada…, y es abrazarte sin esperar nada…: ¡sublime desapego!!!
Siiiiii justamente así
Admirado señor Oyhanarte:
Es un verdadero deleite disfrutar de tanto aprendizaje que adquiero a través de tus poesías. Llevo varios años siguiendo su maravillosa obra, intenté varias veces contactar con usted para entrevistarlo en la radio pero no fue posible, continuo leyendo sus poesías en la emisora con mucho sentimiento y respeto.
Bendigo ese don extraordinario que posee.
Reciba un abrazo de amor y gratitud.
Janeth Sandoval Rojas
Muchas gracias por tus elogios, y por transmitir mis poesías, querida Janeth.
Celebro que los pajarillos de mis rimas hayan encontrado un cálido nido en tu corazón.
Gracias también por tu «abrazo de amor y gratitud»…, y te lo retribuyo con uno igual de cálido, compañera de viaje.
Me ha gustado leer tus inspiraciones y ver que puedo compartir completamente mis sentimientos que curiosamente parecen los tuyos.
Escribí un poema el día 4 que titulé Vivir.
Qué bueno lo que me compartes, colega poeta/poetisa!
Gracias por tu mensaje!
Que andes bien!
Leyendo tus creaciones ! hermosos e inspiradores ! gracias !
Gracias por tu visita, Juliana…, ¡celebro que te agraden los pajarillos de estas rimas!
Que andes bien!