Siente que tu rostro
se va relajando,
y todas tus cuitas
se van disipando.
Visualiza ahora
que en tu propia frente,
una luz muy bella
surge suavemente.
Es una frecuencia
que es supramental,
y te está llegando
desde tu pineal.
Y sus rayos de oro
te dicen así:
“¡recuerda, recuerda…,
tú no eres de aquí!
Tus pies son de barro,
¡y sí…, dejan huellas!,
pero tu alma en cambio
es de las estrellas.
No tienes principio
ni tienes final,
¡y yo te lo digo:
tu propia pineal!
Yo…, que estoy pasando
en tu vida diaria,
(con el hipotálamo
y la pituitaria),
de base carbono
a base diamante,
¡para convertirnos
en Luz destellante!
También tu ADN
sin que se lo pidas,
activa porciones
que estaban dormidas,
y códigos frescos
de noche y de día,
te instalan patrones
de Nueva Energía.
¡Sí…, sé que no es fácil
tanta mutación!:
cambios tan enormes
causan desazón.
Este recableado
de todo tu ser,
te lleva, de a ratos,
a empalidecer.
Dolor de cabeza,
extrañas visiones,
mareos, cansancios,
o palpitaciones.
Es que estás pasando
por aquella fase
en que el Ave Fénix
fallece… y renace.
Y es justo por eso
que ahora te ilumino,
para recordarte
tu origen divino.
¡Vamos…, falta poco
mi humano cansado:
¡ya estás en el medio
del Puente Dorado!
¡Resiste…, resiste,
que no será en vano!:
te estás transformando
en el Nuevo Humano…
Y no te lo dice
alguien marginal:
¡te lo digo yo,
que soy tu pineal!»
Querido Jorge,gracias por tratar este tema,estaba buscando esta información y como siempre todo lo que necesito saber,me es revelado.
Es tal cual y según parece,la recalibración,no ha concluido todavía.
Resulta soportable pero incómodo.
Tu rima anterior»,Vivir sin botonera»,imperdible,muy adecuada para esta época,cuando el confinamiento ha producido fricciones y problemas de relación.Este tema está relacionado con otra hermosa y sabia rima «Me niego a participar» que he estado practicando,con excelentes resultados.
Mil gracias por tus aportes que los pongo en práctica cuando los necesito.
Gracias,gracias,gracias.
Un beso grande
Muchas gracias por tu mensaje tan cálido, dulce amiga!
Respecto a lo que dices sobre que «..según parece, la recalibración, no ha concluido todavía..» , tal vez te interese este posteo de una estadounidense llamada Denise Le Fay de hace unos pocos día sobre la recalibración, y la fase que está en curso actualmente:
https://highheartlife.com/2020/11/
Ella es una especie de Guía/Maestra en todo lo referente al actual proceso ascensional…
(Además, cuando finaliza el art., aparece el dibujito de mensajes de los lectores, con 53 opinando; y lo bueno es que ella responde muchos de esos mensajes, aportando jugosas informaciones complementarias).
(Si todo te aparece en ingles, seguramente también te aparecerá el cartelito de «Google translate» para que le des a «traducir al español»… -al menos, así me sucede a mí, y funciona bien-)
Bueno, Leo…, gracias nuevamente por tu bella amorosidad…
Otro beso grande para ti!
Muchas gracias por el link y por la enorme ayuda que he recibido durante todos estos años .
Infinitas gracias.
!Hola Jorge!
Me ha gustado mucho leerte, pues cosas que hace años empezaron a sucederme y habían cesado (los números repetidos en las horas, los dolores de cabeza y mareos, palpitaciones, etc), han vuelto, tanto tu poesía como la información del enlace que le dejas a Leonor han sido muy esclarecedoras.
Mil gracias por haber llegado a mi vida a través de este espacio virtual.
Sigamos avanzando, bendiciones y buen ascenso.
Qué bueno que la poesía y el enlace que mencionas, te hayan resultado esclarecedores, Idalia!
Y sí…, los “síntomas de Ascensión” han regresado con malestares físicos muy acentuados… (pero también con percepciones muy expandidas y epifanías maravillosas).
Muchas gracias por tus cálidas frases finales, querida amiga!
Lo mejor para ti!
Cuando necesito reencontrarme con mis células y sentirlas, leo uno de sus poemas; reaccionan casi al instante. Me gustaría tenerlos en un libro, para mi sería una joya.
Qué bonito lo que me cuentas, Daisy!
Gracias por compartirmelo!
(Respecto a lo del libro…, bueno…, puedes descargar el ebook gratuitamente, e imprimir las que más te agraden (¡sería un mini libro hecho a medida!)
Bendiciones, amiga!